domingo, 4 de diciembre de 2011

Por el macarrismo hacia Dios

"Por su interés en el arte español de la época, Anthony había examinado la talla en varias ocasiones y siempre le había producido un disgusto rayano en la repugnancia. Sin restar mérito artístico a la escultura, la actitud del personaje, su ropaje suntuoso y sobre todo su cabellera de pelo natural le conferían aires de tenorio y de embaucador. Quizás era eso, había pensado entonces, lo que infundía confianza al vulgo: la divinidad encarnada en un chulo barriobajero"

Eduardo Mendoza: Riña de gatos, 2010

domingo, 13 de noviembre de 2011

El hecho diferencial II

"Vivía un tanto aislado, leyendo mucho, en una ciudad como San Sebastián, en donde no se pensaba por entonces más que en el bueno tono, en el traje y en la buena comida, y se creía que el hombre que leía algún libro por entretenimiento, si no era un perturbado, estaba muy cerca de serlo".
"Larramendi, en la Corografía de Guipúzcoa, asegura que todos los ingresos que la provincia obtenía de las ferrerías se los gastaba después en vino, predilección muy plausible para los adoradores de Baco".

Pío Baroja: El puente de las ánimas (1944)

domingo, 10 de julio de 2011

¡Tu Dios no es más que un fantasma!

¿Qué dificultades específicas ha experimentado que hayan sido causadas por interpretaciones de la audiencia por parte de productores, distribuidores, censores, etc.?

Excepto durante mis primeros tres films, todos hechos antes de 1932, y producidos con absoluta independencia -Un chien andalou, L'Âge d'or y Land without bread- siempre he sentido la presión más o menos pesadamente ejercitada por el productor. Pero uno puede deducir de su pregunta que los productores y distribuidores son culpables de las limitaciones impuestas al director por su especial interpretación del gusto del público. En mi opinión, la responsabilidad real por el estancamiento espiritual del cine es de la masa amorfa, rutinaria y conformista, que configura la audiencia. El productor se limita meramente a lanzar a las fieras la comida que le demandan. Un hombre de negocios ni mejor ni peor que los otros de su tiempo, el productor no tiene escrúpulos. Es capaz de saltar de un plano ideológico a otro, aunque los sistemas sean moral y artísticamente antagónicos, con tal de garantizar prestigio y éxito económico. Por el momento es imposible prever cualquier ascenso moral de la sociedad humana. Por esta razón no aparece una luz tenue del progreso espiritual de la audiencia. Uno incluso puede predecir lo contrario. Los directores continuarán arrastrando las pesadas cadenas del servilismo puestas sobre ellos por la industria y los productores, quienes, como fieles representantes del público, continuarán su represión de la libertad del artista.


¿Cuál considera uno de los progresos más alentadores en el cine en los años recientes? ¿Cuál considera una de las más desalentadoras aportaciones?


A mi manera de pensar no hay una indicación en la producción cinematográfica de los años recientes, sea "capitalista" o "comunista", que aliente cualquier esperanza sobre el progreso espiritual del cine, a menos que sea en sus aspectos técnicos, donde el progreso de ambos es incuestionable.


¿Qué film o films haría si estuviera libre de limitaciones no artísticas como patrocinio, censura, etc.?


Si me fuera posible, haría films que, aparte de entretener a la audicencia, le comunique la absoluta certeza de que NO VIVEN EN EL MEJOR DE LOS MUNDOS POSIBLES. Haciendo esto creo que mis intenciones serían muy constructivas. Las películas hoy, incluidas las llamadas neorrealistas, están dedicadas a una tarea contraria a esa. ¿Cómo es posible esperar por un progreso en la audiencia -y en consecuencia en los productores- cuando cada día se nos dice en estos films, incluso en las más insípidas comedias, que nuestras instituciones sociales, nuestros conceptos de patria, religión, amor, etc., etc., son, aunque quizás imperfectos, ÚNICOS Y NECESARIOS? El verdadero "opio del público" es el conformismo; y el completo y gigante mundo del cine está dedicado a la propagación de este confortable sentimiento, envuelto si bien a veces en el insidioso disfraz de arte".


Robert Hughes: entrevista con Luis Buñuel, en Film: Book I, 1959

domingo, 29 de mayo de 2011

Los visionarios

"Vivía un tanto aislado, leyendo mucho, en una ciudad como San Sebastián, en donde no se pensaba por entonces más que en el buen tono, en el traje y en la buena comida, y se creía que el hombre que leía algún libro por entretenimiento, si no era un perturbado, estaba muy cerca de serlo".

. Pío Baroja: El puente de las ánimas (1944)

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Tren de sombras

"El cine es una diversión para parias, un pasatiempo para iletrados, para criaturas miserables, aturdidas por sus trajines y sus preocupaciones (...) un espectáculo que no exige ningún esfuerzo, que no reclama reflexión, que no suscita dudas, que no plantea con seriedad ninguna cuestión, que no enciende ninguna pasión, que no aviva ninguna luz en el fondo del corazón, que no alimenta ninguna esperanza, a no ser la ridícula esperanza de llegar a ser un día 'estrella de Hollywood'".


Georges Duhamel: Scènes de la vie future. París, 1930


lunes, 2 de mayo de 2011

La cinematografía é l'arma più forte

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"El cine Doré, de Madrid, el más antiguo de la ciudad, duró cuarenta años, y lleva veinte cerrado, en la calle de Santa Isabel (Atocha), entre choricerías y tiendas de pollos.
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Intelectuales y artistas quieren recuperar el Doré como filmoteca, templo del cine mudo o algo así.
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Ya el nombre de Tom Mix, el vaquero no de medianoche, sino de la media tarde de los domingos mudos, con letreros de Ramos de Castro en la pantalla, nos acerca a un pasado vertiginoso.
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El Ayuntamiento socialista, más sensible a estas cosas que los anteriores, puede que haga algo por el cine Doré, cuya portalada neoclásica, recargada y como falleramente carolina, se conserva entre la berza lozana y revuelta del mercado de Santa Isabel. Una gozada".


Francisco Umbral: Diccionario cheli, 1983

sábado, 26 de marzo de 2011

Camino de Damasco (1976)

"La segunda noche Elvis sólo consiguió grabar una canción, Solitaire de Neil Diamond, y no fue poco dado que durante la sesión intentó hacer todo lo posible para que no se alcanzase ni tan siquiera este modesto objetivo. Se retiró varias veces a su dormitorio, llevó a uno u otro componente de la banda al piso superior para hacerle escuchar temas gospel, dio una pequeña conferencia sobre numerología y mostró a todos sus distintivos policiales. Incluso en un determinado momento, cuando se encontraba en su habitación en compañía de Sonny y Red, les mostró el plan que había ideado para cargarse a todos los narcotraficantes de Memphis. Mientras sacaba todas las armas con las que iba a llevar a cabo su siniestro propósito, les dijo que la sesión era la coartada perfecta para hacerlo sin que nadie se enterara de nada. Les mostró las fotos de los camellos que le habían dado sus amigos del departamento de policía de Memphis y numerosos dossiers con detallada información del territorio que controlaba cada uno de ellos. "Bueno, me parece demasiado", dijo en tono dubitativo Red, que estaba harto de las fantasías de Elvis y al que no se le escapaba que su extraño plan se parecía demasiado a la trama de El justiciero de la ciudad, la película de Charles Bronson que Elvis y él habían visto un montón de veces".


Peter Guralnick: Careless love


Camino de Damasco (1973)

"Seis meses después Elvis es ingresado en el Baptist Memorial Hospital de Memphis en estado de semi-coma. Mientras se encontraba en California había comenzado a sentir problemas respiratorios y había alquilado un avión para volver a casa; a bordo de éste Linda había notado que cada vez tenía más problemas para respirar, pese al continuo suministro de oxígeno. En cuanto llegó a Graceland el doctor Nichopoulos fue a examinarlo y se quedó impresionado al verlo: Elvis aparecía lleno de edemas y tan hinchado que casi no podía respirar y sólo a duras penas era reconocible. (...) .
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En cuanto fue capaz de hablar, el doctor Nichopoulos le preguntó qué tipo de fármacos había tomado, pero una vez que los enumeró los médicos constataron que ninguno de ellos contenía sustancias que pudieran justificar el aspecto edematoso de Elvis. Cuando uno de los médicos interrogó a Elvis sobre el origen de los hematomas que le recubrían el cuerpo, éste respondió que eran consecuencia de las sesiones de acupuntura a las que se había sometido en el transcurso de los últimos ocho o nueve meses, pero ninguno consiguió hacerse una idea de cómo era posible que las agujas utilizadas habitualmente para la acupuntura pudieran dejar señales tan evidentes hasta que Elvis no explicó que la terapia se le aplicaba no con agujas sino con una jeringuilla. Cuando el doctor Nichopoulos le preguntó qué contenía la jeringuilla, dijo que no lo sabía. El médico que lo trataba le había dicho algo de un anestésico local para calmar el dolor y un poco de cortisona para acelerar el proceso de recuperación, pero en realidad no sabía con exactitud qué contenía la mezcla. El doctor Nichopoulos afrontó la cuestión en privado con Joe Esposito, que le hizo entender que bajo esa historia de las inyecciones que Elvis se había hecho suministrar cada vez con mayor frecuencia había algo que olía mal. El doctor Nichopoulos telefoneó al médico a California, y tras informarle con tono enfadado de que Elvis se encontraba muy, muy mal, consiguió hacerle decir la verdad, esto es, lo que cualquiera de sus amigos habría podido decirle: Elvis se hacía practicar inyecciones de Demerol [N. de T.: lo mismito que se pinchaba su futuro yerno Michael Jackson, lo mismito a lo que Jacko dedicó su tema Morphine], y lejos de no saber con exactitud el contenido de la sustancia había exaltado frecuentemente sus maravillosas virtudes curativas y en diversas ocasiones se había incluso hecho suministrar el remedio por algunos de sus amigos. Fue en ese momento cuando el doctor Nichopoulos comprendió que su paciente debía ser curado y tratado como un toxicodependiente.

Tras esta desconcertante revelación, el doctor Nichopoulos consultó a los doctores David Knott y Robert Fink, especialistas en toxicodependencia, y siguiendo sus recomendaciones hizo suministrar inmediatamente a Elvis barbitúricos para evitar que sufriese una crisis de abstinencia. Al día siguiente comenzó a administrarle dosis regulares de metadona, usada habitualmente en el tratamiento de toxicodependientes, y llamó al doctor Larry Wruble, un gastroentorólogo, que le hizo efectuar radiografías que revelaron la existencia de un ileo, esto es, de un estado caracterizado por el freno de la progresión del contenido intestinal. Los intestinos de Elvis, en resumidas cuentas, estaban repletos de materia fecal atascada: sin duda, una consecuencia del prolongado uso de opiáceos y causa principal de la hinchazón abdominal que le afectaba".

Peter Guralnick: Careless Love

martes, 8 de febrero de 2011

Camino de Damasco (1966)

"Elvis sentía en su interior una serenidad completamente nueva, que sin embargo a sus amigos no les pareció más que una nueva demostración de su locura; cada vez se sentían más ajenos a él, perplejos, confundidos, cargados de resentimiento y de rabia. Cada día Elvis los dejaba atónitos al tiempo que los dejaba consternados con sus ocurrencias: afirmaba que tenía visiones cada día y que antes o después dejaría la Tierra a bordo de una nave espacial, creía que podía ser capaz de accionar sólo con la fuerza de su pensamiento la instalación de regadío del campo de golf del Bel Air Country Club, y estaba convencido de poder sanar cualquier enfermedad, desde un resfriado común hasta los dolores más molestos, con sus poderes de curandero. A Marty le contó que el canto de un pájaro se había transformado en la voz de Cristo, y si las circunstancias hubieran sido otras sus amigos habrían tenido la tentación de ingresarlo de urgencia en un hospital psiquiátrico, pero la razón les decía que no se trataba más que de un nuevo capricho que pronto pasaría, tal y como en el pasado se había vuelto loco con tonterías como aquéllas".

Peter Guralnick: Careless Love
(Mondo Cane siempre supuso lo del platillo volante)

domingo, 30 de enero de 2011

Camino de Damasco (1965)

"Elvis y compañía se pusieron en marcha y atravesaron New Mexico y Arizona viajando por el desierto, bajo un cielo iridiscente que parecía caer sobre las montañas sagradas de los indios Hopi y conferir a todo lo que se extendía bajo la vista un tinte celestial que comunicaba un sentido de paz. Elvis conducía en silencio, con Larry sentado a su lado y los demás en el asiento trasero. Pero en cuanto dejaron atrás Flagstaff, sucedió.


Repentinamente, Elvis tomó aire violentamente y dijo "¡Uh!". Me giré hacia él y vi que estaba hundido en su asiento, con la boca abierta de par en par del estupor y mirando fijamente algo en el horizonte; siguiendo su mirada, vi una nube, una sencilla masa nubosa que flotaba en el cielo. De la nube emergía una imagen claramente reconocible.

"¿Tú también ves lo que estoy viendo yo?", preguntó Elvis con una voz que no era más que un susurro. Miré atentamente. "¡Es la cara de Stalin! ¡Ahí arriba!".

Por mucho que intentara percibir otra cosa diferente, era innegable que allí, en el cielo, estaba la cara de Stalin.

"¿Por qué Stalin? ¿Por qué Stalin?", preguntaba Elvis con la voz rota. "De toda la gente del mundo, ¿por qué precisamente él?".

Antes de que pudiera responder, la nube giró sobre sí misma, cambió de forma y dimensión y la imagen se fue desvaneciendo lentamente hasta desaparecer. Sabía que habíamos sido espectadores de algo verdaderamente extraordinario, y me giré hacia Elvis para decírselo, pero cuando lo hice enmudecí al ver la expresión de su rostro: miraba fijamente la nube, con los ojos abiertos de par en par y una expresión de completa maravilla. Es imposible describir el aspecto de Elvis... pero su expresión es la misma que se encuentra descrita tantas veces en la Biblia o en otros textos religiosos: era la expresión de alguien que acaba de recibir el bautismo o que acaba de convertirse. (...)

Elvis se giró, se echó a un lado de la carretera y paró bruscamente el vehículo. "¡Sígueme, Larry!", gritó mientras abría la puerta, se lanzaba fuera del coche y echaba a correr por el desierto. Lo seguí, y cuando conseguí alcanzarle y estar junto a él, en pleno desierto, golpeado por una fresca brisa, vi que tenía el rostro radiante de felicidad.

"¡Ha sido Dios!", gritó. Elvis tenía el rostro repleto de lágrimas mientras me abrazaba y me decía: "Te lo agradezco desde lo más profundo de mi corazón. Tú me has traído hasta aquí y no lo olvidaré nunca, nunca, amigo mío. Ha sucedido. He visto la cara de Stalin y he pensado ¿por qué Stalin? ¿Se trata de una proyección de algo que se encuentra en mi interior? ¿Se trata de que Dios está intentando hacerme saber qué piensa de mí?... ¡Pero ha sucedido! La cara de Stalin se ha transformado en la de Jesús, que me ha sonreído, y cada fibra de mi organisma Lo ha sentido. Por primera vez en mi vida, Dios y Cristo son una realidad viva: ¡Dios, Dios!" (...)

El resto del viaje no transcurrió sin problemas. Mientras Elvis vivía encendido de un místico ardor (...) la motor home ardió en medio del desierto de Mojave. [Llegados a Los Angeles] Elvis llevaba 36 horas sin pegar ojo, y todavía se encontraba encendido por el entusiasmo de la revelación que había tenido. Quería abandonar su carrera, le decía a Larry con un tono de voz que expresaba una decisión que jamás había expresado: quería renunicar a todo y hacerse monje".

Peter Guralnick: Careless Love