domingo, 10 de julio de 2011

¡Tu Dios no es más que un fantasma!

¿Qué dificultades específicas ha experimentado que hayan sido causadas por interpretaciones de la audiencia por parte de productores, distribuidores, censores, etc.?

Excepto durante mis primeros tres films, todos hechos antes de 1932, y producidos con absoluta independencia -Un chien andalou, L'Âge d'or y Land without bread- siempre he sentido la presión más o menos pesadamente ejercitada por el productor. Pero uno puede deducir de su pregunta que los productores y distribuidores son culpables de las limitaciones impuestas al director por su especial interpretación del gusto del público. En mi opinión, la responsabilidad real por el estancamiento espiritual del cine es de la masa amorfa, rutinaria y conformista, que configura la audiencia. El productor se limita meramente a lanzar a las fieras la comida que le demandan. Un hombre de negocios ni mejor ni peor que los otros de su tiempo, el productor no tiene escrúpulos. Es capaz de saltar de un plano ideológico a otro, aunque los sistemas sean moral y artísticamente antagónicos, con tal de garantizar prestigio y éxito económico. Por el momento es imposible prever cualquier ascenso moral de la sociedad humana. Por esta razón no aparece una luz tenue del progreso espiritual de la audiencia. Uno incluso puede predecir lo contrario. Los directores continuarán arrastrando las pesadas cadenas del servilismo puestas sobre ellos por la industria y los productores, quienes, como fieles representantes del público, continuarán su represión de la libertad del artista.


¿Cuál considera uno de los progresos más alentadores en el cine en los años recientes? ¿Cuál considera una de las más desalentadoras aportaciones?


A mi manera de pensar no hay una indicación en la producción cinematográfica de los años recientes, sea "capitalista" o "comunista", que aliente cualquier esperanza sobre el progreso espiritual del cine, a menos que sea en sus aspectos técnicos, donde el progreso de ambos es incuestionable.


¿Qué film o films haría si estuviera libre de limitaciones no artísticas como patrocinio, censura, etc.?


Si me fuera posible, haría films que, aparte de entretener a la audicencia, le comunique la absoluta certeza de que NO VIVEN EN EL MEJOR DE LOS MUNDOS POSIBLES. Haciendo esto creo que mis intenciones serían muy constructivas. Las películas hoy, incluidas las llamadas neorrealistas, están dedicadas a una tarea contraria a esa. ¿Cómo es posible esperar por un progreso en la audiencia -y en consecuencia en los productores- cuando cada día se nos dice en estos films, incluso en las más insípidas comedias, que nuestras instituciones sociales, nuestros conceptos de patria, religión, amor, etc., etc., son, aunque quizás imperfectos, ÚNICOS Y NECESARIOS? El verdadero "opio del público" es el conformismo; y el completo y gigante mundo del cine está dedicado a la propagación de este confortable sentimiento, envuelto si bien a veces en el insidioso disfraz de arte".


Robert Hughes: entrevista con Luis Buñuel, en Film: Book I, 1959

No hay comentarios: